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Hijo mío, si un intelectual es incapaz de explicarte sus ideas de manera que lo comprendas, tómalo como algo personal. El imbécil te está tomando el pelo.
¿Puedes romper los corazones?
¿Pueden los corazones hablar?
¿Puedes torturar los corazones?
¿Puedes robar los corazones?
Quieren mi corazón del lado derecho,
pero entonces miro hacia abajo,
allí late del lado izquierdo
¿Pueden los corazones cantar?
¿Puede un corazón estallar?
¿Pueden los corazones ser puros?
¿Puede un corazón ser de piedra?
Quieren mi corazón del lado derecho,
pero entonces miro hacia abajo,
allí late del lado izquierdo
¿Se puede pedir a los corazones
que lleven a un niño debajo?
¿Puedes regalarlo
pensando con el corazón?
Quieren mi corazón del lado derecho,
pero entonces miro hacia abajo,
allí late en el pecho izquierdo
El envidioso lo ha entendido mal
Izquierda dos tres cuatro
4 comentarios:
Para mi esta entre Sanja Dedijer y Elena Pertac.
Coincido y agrego a Mariam Mansur (aunque no juegue tan bien) y a Anna Sharevich (que parece la versión bielorrusa de Nicole Kidman).
DEG, debo decir que pocas veces he visto un enlace tan original y sorprendente. Uno siempre asocia juegos como el ajedréz o los clubes de lectura a chicas poco agraciadas que ni se gastan en explotar sus encantos. Pero esto echa por la borda ese prejuicio.
Debo decir que Sanja Dedijer y su (hermana?) Mira Dedijer confirman que los balcanes y territorios aledaños tienen un patrimonio de bellezas que deberia ser protegido por la UNESCO y la ONU, como mínimo.
Además, que les apasione el ajedréz me resulta sumamente atractivo, quien sabe por qué...
Fino, ni aunque me lo propusiera podría coincidir más con usted.
Yo jugué al ajedrez un par de años y las mujeres eran escasísimas y no muy agraciadas. Mi sopresa fue idéntica.
Le doblo la apuesta, y propongo iniciar una campaña para que la UNESCO declare a las bellezas balcánicas patrimonio de la humanidad.
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